No tomaré
préstamos ni fiao con intereses... y así aprovecharé todo mi dinero
A mediados
del año 1999 en mi abultada familia no había dinero con qué comer ni siquiera
guineítos verdes con aceite amarillo. Pero... ¿Había sido el país azotado por
algún ciclón batatero? ¿Había perdido el empleo?, nada de eso, el país
andaba bien y mi empleo estaba mejor
que Lola.