Páginas

domingo, 14 de julio de 2013

Plan de salud económica

Cada mes ahorraré y gastaré menos de lo que gano

Podemos decir que existe una buena “salud económica” cuando no tenemos deudas de consumo con intereses, gastamos menos de lo que ganamos, creamos un fondo para usarlo únicamente en casos de emergencia y ahorramos en un plan de jubilación para asegurarnos de que en nuestra vejez recibamos dinero todos los meses para mantenernos.

RUTA DE SALUD ECONÓMICA

Eliminación de deudas de consumo.
Fondo de sobregiro.
Fondo de emergencia.
Ahorro para proyectos.
Ahorro en plan de jubilación.

ELIMINACIÓN DE DEUDAS DE CONSUMO

Préstamos y prestamistas son, para muchos, una impresionante realidad que forma parte de nosotros. Intentar apartarnos bruscamente de hábitos con raíces profundas en nuestra naturaleza conductual puede guiarnos al desaliento y al fracaso.

Como primer paso para acabar con este tipo de deudas podemos tomar la decisión de no comprar nada a crédito, reducir gastos en todas las cosas que podamos y dedicarnos firmemente a pagar las deudas existentes, abonando para ellas cada peso que aparezca por ahí o por allá.

FONDO DE SOBREGIRO

Después de terminar con las deudas de consumo el siguiente paso será formar un pequeño fondo para cubrir algún gasto imprevisto y poco común, para el cual nos sentimos en  la obligación o el deber de responder.

El monto de este fondo de sobregiro lo decide usted según guste. Una medida adecuada es que este fondo sea entre una cuarta parte y la mitad de su salario. Si gana RD$8,000 su fondo iría de 2 mil a 4 mil.

Luego de hacer algún gasto, buscaremos la forma de reponer el dinero utilizado, ya sea haciendo aportes durante varias semanas,  meses o de cualquier otra forma posible.

FONDO DE EMERGENCIA

En todo momento estamos expuestos a situaciones lamentables e imprevistas que demandan el uso inmediato de dinero en su solución. No sabemos en qué momento aparecerá una de esas crisis, pero si estamos seguros de que tarde o temprano recibiremos la noticia de que un familiar cercano tiene un problema judicial, que está grave después de un accidente o por enfermedad. O que a nosotros hay que tratarnos de una peligrosa enfermedad para la cual, si lo tenemos, el seguro de salud sólo cubre una parte de los gastos. Si para afrontar estas situaciones definitivamente no tenemos el dinero necesario, entonces sufrimos las peores consecuencias que puedan derivarse del caso.

Es evidente que para la gran mayoría de la población resulta imposible tener el dinero necesario para satisfacer todas sus necesidades, sean éstas reales o inventadas. Al caer cien pesos en nuestras manos ya tenemos cosas pendientes esperando por valor de miles de pesos. Esta verdad implica que mucha gente no dispone de dinero al momento en que se ve ante un caso de emergencia y en otras situaciones incluso es asaltada por la crisis cuando está muy maltratada por las deudas.

Para que estemos libres de deudas y tengamos ahorros, tienen que ocurrir  profundos cambios en nuestra forma de gastar, tenemos que armar formas seguras de mantener esos ahorros, y sobre todo tenemos que sentir que de verdad se justifica el sacrificio de tener guardado un dinero y no darnos gustos y placeres con él.

Para el fondo de emergencia estamos hablando de ahorros que eventualmente salvarán nuestras vidas.

Se estima que el fondo de emergencia debe estar entre 3 y 6 veces el salario que cobramos mensualmente. Para quien gana RD$10,000 este fondo andaría entre 30 y 60 mil pesos. Después de formar este fondo, para mantenerlo hay que actuar con firmeza para usarlo exclusivamente en casos de emergencia.

También es conveniente definir en qué proporción y para cuáles miembros de la familia estará destinado. Así mismo es útil tratar de convencer a los hijos, hermanos y tíos, que tienen ingresos regulares, para que también posean su propio fondo de emergencia.

Además aclarar con los hermanos que todos tienen igual compromiso ante una emergencia de sus padres, por lo que ninguno podrá agacharse o querer aprovecharse alegando que no tiene dinero, cuando posee un empleo, bienes, facilidad para préstamos y derrocha en gastos no prioritarios.

En el caso de que aporte lo que corresponda a otros hermanos, tratar de que sea en calidad de préstamo, con documentos firmados.

¿Dónde y como tener el dinero del fondo de emergencia?

La primera opción es depositarlos en una cuenta de ahorros la cual es segura y permite retiros rápidos aunque tiene el inconveniente de que con el tiempo nuestro dinero pierde valor por efecto de la inflación.

Otro inconveniente es que la facilidad de retiro es en sí una tentación para nosotros y un riesgo de cara a los demás porque alguien tratará de engatusarnos para darle a nuestro dinero otro uso diferente al planeado.

Ante esos tiburones de tierra sea firme y convincente. Diga que a ese dinero, fondo de emergencia, se le está dando el mejor de los usos, que es precisamente estar listo para un verdadero caso de emergencia de aquellos para quienes está destinado, se lo merecen y en la proporción máxima preasignada. No ceda ante demandas y promesas que lucen como un sueño del paraíso para pronto descubrir que son el puro infierno.

De todos modos una de las mejores medidas de protección para este fondo es que su existencia sólo sea conocida por una o dos personas, sin decir mentiras, pero también sin desnudar verdades altamente vulnerables ante el asedio tenaz de situaciones incontrolables.

En nuestro entorno aparecen unos vivos que  usan su dinero para darse gustos y pretenden que el nuestro sea para resolver los problemas de ellos.

Si un hermano suyo, pobre también, que no dispone de reservas de alimentos, amanece con cien pesos y rápidamente los gasta en ron y juego de lotería, para cuando sea de noche podría tener una hambre bestial porque de verdad verdad, no tiene dinero con qué comer.

Si usted conmovido por su tragedia le regala precisamente cien pesos para que coma, nos hacemos la siguiente interrogante:

¿Los cien que usted le dio fueron los que el se comió o fueron los que jugó y se bebió por la mañana? ¿Por qué esta pregunta aparentemente ilógica?

El dinero que su hermano posee es primero, ante todo, para satisfacer sus necesidades básicas de supervivencia, o sea para comer. Si le sobra, entonces hacer uso en educación, salud, ropa etc. Y si todavía le sobra mucho dinero es aceptable que gaste en vicios no peligrosos.

¿Qué ocurre si usted no le da los cien pesos?
El empieza a entender que usted no apoya su sinvergüencería.
A su hermano no le pasará nada porque una persona soporta viva más de 20 días sin comer y el sólo lleva un día.

La segunda opción es tener el fondo de emergencias en certificados de participación o a plazo fijo en bancos comerciales, con la opción de poder cancelarlos o retirarlos cuando se necesiten. En esta forma el dinero pierde menos valor y nadie estará inventando con ellos.

En caso de que no sea posible tener un fondo de emergencia real, podríamos entonces habilitar un fondo de emergencia aparente, el cual consiste en tener preparada alguna vía para obtener prontamente, en uno o dos días, el dinero que necesitáramos para una crisis en el futuro.



Una forma es conseguir la aprobación de un préstamo personal o extracrédito con tarjeta para ser utilizado en el futuro, sin que nos cueste nada mientras no lo usemos. En varias entidades financieras disponen de este tipo de crédito.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Escriba aquí su comentario